Estación de tren Teruel

Estación de tren de Teruel

La estación de tren de Teruel es una de las más bonitas del territorio español gracias, en parte, a que no ha sufrido modificaciones relevantes en su fachada desde que fuera inaugurada a comienzos del siglo XX. Situada en el camino de la Estación, en la zona este de la ciudad, la estación sí ha adaptado sus líneas ferroviarias a las necesidades actuales y cuenta con tres vías por donde pasan trenes de media distancia. El ferrocarril conecta directamente a Teruel con Zaragoza en un viaje de dos horas y cuarto. Por otra parte, también puedes viajar desde Madrid, por ejemplo, en apenas cuatro horas de trayecto. Desde la terminal podrás llegar caminando en poco tiempo a casi cualquiera de los puntos de interés de esta localidad aragonesa, pero también dispones de servicios autobús urbano –enfrente de la estación puedes coger las líneas A, B y P– y de radio-taxi.

Atracciones principales cerca de la estación de tren de Teruel

Uno de los puntos de obligada visita en Teruel se encuentra muy cerca de la estación. Hablamos de la Escalinata, una obra de carácter neomudéjar que alcanzarás al rodear por la calle del Óvalo. Su misterio radica en su belleza y en que, precisamente, fue construida para conectar la estación con el centro histórico. Teruel cuenta con dos puntos de interés arquitectónico religioso muy aconsejables de visitar. El primero es la catedral de Santa María de Mediavilla, ubicada a diez minutos caminando de la estación de tren de Teruel. Se trata de un edificio cuya belleza reside en la combinación de estilos góticos con toques cristianos e islamistas, que ofrecen una buena muestra del rico pasado del municipio. Por esta zona también puedes visitar el Museo Provincial, que entre sus paredes reúne una extensa y variada colección de objetos sobre la localidad. El otro edificio religioso de interés es la iglesia de San Pedro, a la que llegarás caminando durante diez minutos desde la estación hasta la plaza de la Judería. Aquí destaca la imponente torre-campanario y el mausoleo adjunto, que recuerda la leyenda de los Amantes de Teruel y que hacen de esta ciudad un habitual destino romántico. Cruzando por la calle Hartzembusch llegarás a la fuente del Torico, punto de encuentro del turismo turolense emplazada a menos de diez minutos caminando desde la estación. Los alrededores de esta fuente son un buen escenario para probar el jamón de Teruel o el llamado “regañao”, uno de los platos más típicos del municipio.