Es una ciudad ubicada en la región del País Vasco en el noreste de España. Bilbao se caracteriza por ser una ciudad moderna, cultural y con una gastronomía de gran calidad. Goza de una arquitectura urbana muy variada y cuenta con un gran paseo fluvial que atraviesa la ciudad. Visitar esta ciudad es adecuado en cualquier época del año ya que tiene clima oceánico templado. Reserva un billete de tren a Bilbao, saborea tradicionales pintxos en el mercado cubierto más grande de Europa y pasea por su mágica ría.
Bilbao se encuentra en el corazón del País Vasco, de cara a la ría del mismo nombre y al resguardo de los Montes Vascos. La capital vizcaína es la cuna del pintxo, el hogar del Guggenheim y la mejor representante del art nouveau. Además, puede presumir de albergar el mercado cubierto más grande de Europa y el primer puente del mundo que hace las veces de trasbordador.
La ciudad vasca derrocha modernidad y colorido y ofrece en el mismo paquete lo mejor de la ciudad, del campo y de la playa. La mejor forma de conocer todos estos encantos es coger un tren a Bilbao y plantarse en la ciudad.
Bilbao recibe un buen número de viajeros al año, muchos de los cuales optan por llegar en tren. Y lo hacen a la estación Abando Indalecio Prieto, ubicada en la plaza Circular del barrio que le da nombre, en la orilla izquierda del río Nervión y muy cerca del casco antiguo de la ciudad vasca. Es la más importante de la capital vizcaína, tanto por el volumen de pasajeros que mueve como por la gran cantidad de rutas que opera. Destila monumentalidad gracias a la gran vidriera policromada, integrada por más de 300 piezas, ubicada en la zona de los andenes, y por su fachada clasicista.
Además de tener conexión con las líneas de metro L1 y L2, ofrece servicio de cercanías y de Larga Distancia, operados principalmente por la línea de Alta Velocidad Alvia. Gracias a este servicio de Renfe, el viajero tendrá la posibilidad de viajar en tren desde Bilbao a León en 4 horas y 46 minutos o desde Bilbao a Madrid en 5 horas y 6 minutos.
La estación Abando Indalecio Prieto tiene la ventaja de que, además de estar próxima al centro de la ciudad y del casco viejo, está bien comunicada con el resto de Bilbao, tanto por transporte público como por privado.
Desde la estación de tren bilbaína al casco viejo hay unos pocos metros. La parte más antigua de la ciudad está recorrida por un entramado de calles peatonales, rebosantes de tabernas típicas donde sirven tapas tradicionales, tortilla, tigres, txangurro, bacalao o gambas, y de restaurantes en los que se pueden saborear propuestas típicas de su recetario, como goxua, marmitako, bacalao al pil-pil o angulas.
También hay una generosa oferta de hoteles, que permiten dormir con vistas a algunas de sus joyas arquitectónicas. Y es que en esta parte añeja de Bilbao, también conocida como "las siete calles" se encuentran algunos monumentos importantes, como la iglesia de San Antón o la catedral de Santiago. La plaza Nueva lo articula y es un espacio de esparcimiento en el que se celebran numerosos acontecimientos, como la feria de Santo Tomás o el mercadillo de los domingos. Por si fuera poco, aquí se encuentran museos interesantes, como el Etnológico y el Histórico Vasco o el Arqueológico.
Visitar el mercado de la Ribera constituye un final de lujo al recorrido por el caso viejo. Se tiene ganada una visita por su bonito diseño, obra de Pedro Ispizua, y porque en sus puestos el viajero podrá degustar la gastronomía más auténtica de la ciudad y, por supuesto, clásicos pintxos. Después, se puede aprovechar para dar un paseo por la ría de Bilbao, ubicada a unos metros, y disfrutar de unas vistas únicas. Los que buscan espacios verdes y relax, pueden acudir al parque Etxebarria, que está en la parte alta del casco viejo. En este pulmón verde, el más grande de la ciudad, el viajero podrá disfrutar de la naturaleza en su sentido más amplio.
Se puede comenzar la visita desde la estación de tren de Bilbao. Desde allí, lo mejor es cruzar el puente que atraviesa el río Nervión y llegar hasta el Teatro Arriaga, un maravilloso edificio Neobarroco del siglo XIX. Ya en el casco viejo de la ciudad, se puede visitar la catedral a unos pocos metros del Teatro Arriaga y la Plaza Nueva donde se poder degustar de unos ricos pintxos, propios del País Vasco. En el otro lado de la ciudad se encuentra el Museo Guggenheim, un museo de arte contemporáneo caracterizado por sus placas de titanio y su aspecto deconstructivista. En el exterior de este centro se encuéntralas esculturas Puppy, cachorro de perro creado con flores y la Mamá, una araña realizada en bronce y acero. Al lado se encuentra el parque Republica de Abando, en el que se encuentra el grandiosa torre de Iberdrola. En la otra parte del río se puede avistar una bonita panorámica de la Universidad de Deusto.
A las afueras del núcleo urbano de Bilbao se encuentra el Puente Vizcaya, un puente transbordador de estructura metalizada de vehículos y personas que une las localidades de Baracaldo y las Arenas en Guecho. Está considerado como el puente-plataforma colgante en funcionamiento más antiguo del mundo.
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