Trenes a Ámsterdam

Ámsterdam, el dique de Amstel

Ámsterdam quiere decir el dique de Amstel, esto es porque la ciudad se encuentra a orillas de dicho río, en la bahía del IJ. Es la capital de los Países Bajos y está formada por decenas de islas unidas por puentes. Los canales se han convertido en una de sus principales señas de identidad, además de ser una forma de controlar el río Amstel y de comunicar la ciudad. Su magia radica en la interesante mezcla de un estilo de vida moderno con un ambiente histórico del siglo XVII. Para llegar aquí, nada mejor que comprar tu billete de tren a Ámsterdam en la página de Trainline. Paga con Apple Pay, PayPal, MasterCard o Visa sin comisiones o tasas adicionales.

 

Reserva tu viaje en tren a Amsterdam

La estación Central de Ámsterdam es un bello ejemplo de estilo neorrenacentista. Para su construcción, en el siglo XIX, hizo falta el desarrollo de tres islas artificiales y el uso de más de 8 000 pilares de madera. El responsable de esta importante obra arquitectónica fue Pierre Cuypers, que también diseñó el Rijksmuseum. Por esta estación pasan a diario alrededor de 250 000 pasajeros, cifra que muestra la importancia que tiene para la capital. En su interior es posible encontrar una amplia variedad de tiendas y de restaurantes.

Además, cuenta con prácticos servicios para los viajeros, como son el cambio de divisas, puntos de información turística y locales para el alquiler de bicicletas. Es posible viajar en tren de Barcelona a Ámsterdam en una media de 12 horas. Trainline pone a tu disposición billetes económicos operados por Renfe-TGV inOUI y la compañía de alta velocidad Eurostar. Otra de las opciones más frecuentes es viajar en tren de París a Ámsterdam en poco más de 3 horas. Una de las compañías que ofrece conexiones directas es Eurostar, que puedes reservar cómodamente en Trainline.

 

Transporte público en Ámsterdam

Esta ciudad holandesa cuenta con una magnífica red de transporte público que conecta el centro con los principales puntos de acceso. Este sistema de trenes, tranvías, ferris, metro y autobuses está gestionado por la compañía GVB. Aquí tienes las principales informaciones:

• Autobús: Más de 200 autobuses recorren la ciudad de Ámsterdam a lo largo de todo el día. El horario normal de funcionamiento es desde las 6:00 a las 00:30 horas, momento en el que comienzan a funcionar los autobuses nocturnos. El billete sencillo varía de precio en función de si es de día o de noche. Existen diversas tarjetas de transporte que permiten ahorrar.
• Metro: Al contrario que en otras ciudades europeas, el metro de Ámsterdam no es el medio más indicado para desplazarse por la ciudad. Solamente cuenta con cuatro líneas y ninguna de ellas conecta con el centro histórico. Funciona de 6:00 a 00:30 horas, con una frecuencia de paso de aproximadamente 10 minutos.
• Tranvía: Dispone de 14 líneas y es, junto a las bicicletas, el transporte preferido para desplazarse por la ciudad. Las líneas que salen desde la estación Central son la 1, 2, 5, 9, 13 y 17, dirigiéndose a diferentes puntos del centro. Su horario de funcionamiento es también de 6 de la mañana a 12:30 de la noche, con una frecuencia de 5-10 minutos.
• Taxi: El servicio de taxi es otra de las opciones para moverse por la ciudad.
• Bici: Ámsterdam está perfectamente adaptada para circular en bicicleta, con más de 15 000 kilómetros de carril. Además, cuenta con infinidad de aparcamientos donde poder dejarla.

Qué visitar en Ámsterdam

Viajar en tren a Ámsterdam es una forma rápida y sencilla de llegar al corazón de la capital holandesa. Desde allí es fácil acceder a las principales atracciones turísticas. Se puede hacer una ruta comenzando por los museos más destacados de la ciudad, como el Rijksmuseum o museo Nacional de Holanda, el de Van Gogh y la Casa de Ana Frank. Mientras vas de uno a otro puedes apreciar la belleza de sus canales y sus originales casas flotantes. Si prefieres lo natural, nada como visitar el tradicional mercado de Flores para hacerse con un típico tulipán o pasear por el Vondelpark que, con 45 hectáreas, es su parque más grande.

No dejes de visitar el Begijnhof, un patio medieval donde se encuentra la casa más antigua de la ciudad. Para terminar, nada como dar una vuelta por el famoso barrio Rojo y entrar a tomar algo en los conocidos coffee shops del centro de la capital. Un buen momento para hacer este recorrido es en la famosa festividad del Día del Rey. Tiene lugar el 27 de abril y celebra el nacimiento de su monarca, fecha en que las calles se llenan de gente, música y se visten de naranja, el color de la casa Orange. No te vayas sin probar el delicioso queso holandés.

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Qué ver en Ámsterdam: en tren a la ciudad de los canales

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