Sitges es un municipio de la costa mediterránea de Cataluña, a unos 40 kilómetros al sur de Barcelona. Un viaje en bus a Sitges permitirá a los visitantes escapar del bullicio de la capital y disfrutar de las maravillosas playas de la localidad. Su ubicación entre el mar y la montaña hace de ella un destino ideal para los amantes de los deportes al aire libre, ya que siempre encontrarán alguna actividad interesante en la zona. El centro histórico de la ciudad resulta también una visita muy interesante y un lugar ideal para disfrutar de la estupenda gastronomía marinera de la zona.
Sitges no cuenta con una estación central de autobuses, sino con múltiples paradas por toda la ciudad que comunican el municipio con las localidades cercanas. Sitges está especialmente bien conectada con la región de Cataluña, ya que resulta un destino costero muy popular en la zona. Por ejemplo, la empresa Mon Bus ofrece servicios desde Barcelona. La ruta en autobús de Barcelona a Sitges dura aproximadamente 50min y el bus para en diferentes lugares de la localidad, como el Parc de Can Robert y la zona del camping, algo más alejada del centro. Para visitar Sitges desde otros municipios catalanes es posible utilizar el transporte ferroviario. La estación de tren de Sitges se encuentra justo al norte del centro de la ciudad, por lo que es una opción muy cómoda para empezar a descubrir la localidad. Renfe ofrece diversas conexiones, como el trayecto de Tarragona a Sitges, que se puede realizar también en unos 40min de media. También es posible utilizar los servicios de Renfe para trayectos más cortos. Por ejemplo, existe una rápida conexión en tren entre Sitges y Vilanova i la Geltrú, el municipio más cercano al sur de la costa de Sitges.
Sitges es un municipio de tamaño reducido, por lo que resulta muy cómodo recorrerlo a pie. Sin embargo, sí que existen medios de transporte público que comunican el centro de la ciudad con playas y zonas de la localidad algo más alejadas, como el camping de Sitges. Asimismo, hay muy buenas conexiones en autobús con el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, gestionadas por la empresa Mobus. Para viajar desde aeropuertos de otras zonas de Cataluña, como Reus o Girona, es necesario tomar un autobús hasta Barcelona y llegar a Sitges desde ahí. Los viajeros que vayan en tren a Sitges tampoco tendrán dificultades para desplazarse hasta el centro de la ciudad y la zona de playa, ya que la estación está a 7min a pie de la misma.
Los turistas que quieran moverse por Sitges en autobús urbano cuentan con un total
de 3 líneas a su disposición. La empresa encargada de gestionar estos trayectos, que cubren todos los puntos del casco urbano y las afueras del municipio, es Transports Ciutat Comtal. Todas las líneas salen de la estación de Renfe de Sitges y tienen una frecuencia de 30min, circulando hasta las 20:45. No existen servicios de autobús nocturno en Sitges. La línea 1 recorre el norte de la ciudad, por la urbanización Valpineda; la línea 2 circula por la zona del centro y la línea 3 circula hacia el oeste, en dirección a la parada del campo de fútbol.
También es posible desplazarse en taxi por Sitges. La Asociación de Taxis de Sitges ofrece servicios las 24 horas del día y es posible solicitarlos por teléfono. En su flota cuentan con taxis para 4, 6 ó 8 personas, y también con un vehículo con rampa adaptado para viajeros con problemas de movilidad. Asimismo, es posible encontrar taxis en alguna de las 5 paradas oficiales: la estación de tren, el Centro Comercial Oasis, el Hotel Dolce Sitges, el Paseo Marítimo (altura con Avenida Sofía) y el Hotel Meliá. En los meses de verano se añaden 2 paradas más a esta lista: en el Paseo Marítimo (altura con Hotel Terramar) y en el paseo de la Ribera (frente a Hotel Platjador), aunque ésta solo está activa por la noche.
La ruta a pie por Sitges comienza caminando unos 10min hacia el sur desde la estación de ferrocaril. Durante el paseo, los visitantes podrán contemplar varios edificios modernistas, como la Casa Pere Carreras, con unos bonitos balcones de hierro, o villas de tipo neogótico, como la espectacular Villa Avelina. La primera parada en el recorrido es el Museu de Marciel. Este antiguo palacio, que también incluye algunas casitas blancas de pescadores y que anteriormente fue un hospital, alberga una impresionante colección de arte. Justo al lado del museo, a tan solo 2min a pie, se encuentra la iglesia de San Bartolomeu. Este antiguo edificio se construyó sobre una colina, por lo que ofrece unas vistas impresionantes del puerto deportivo y el Paseo Marítimo. También junto al palacio de Marciel está el Museo Cau Ferrat, en el que se visitan la casa y el taller del famoso pintor modernista Santiago Rusiñol.
Tras esta visita, llega la hora de disfrutar de una buena comida junto al paseo marítimo. Sitges, dada su tradición pescadora, destaca por sus platos con productos del mar. Entre estos los más típicos son el "arroz a la sitgetana", que combina ingredientes de mar y montaña, y el xató, una especie de ensalada con anchoas, atún y bacalao. También es obligado probar la malvasía, un vino dulce de postre muy famoso en la localidad. Con el estómago lleno, llega la hora de proseguir la ruta. Pasado el Club Náutico se encuentra el Paseo Marítimo de Sitges, que pasa junto a famosas playas como la de la Fragata, la de la Ribera y la de l’Estanyol, perfectas para darse un chapuzón o simplemente contemplar la bella puesta de sol sobre el Mediterráneo. Además, alrededor del paseo se alzan varias casas de estilo colonial, construidas por los indianos que hicieron fortuna en las Américas.