Desde la céntrica estación de autobuses se puede acceder a los puntos de mayor interés turístico para comenzar la visita de Huelva. Se puede llegar al casco histórico andando en unos 10 minutos. Allí se encuentran lugares emblemáticos de la ciudad, como la plaza de las Monjas, centro neurálgico y lugar ideal para disfrutar de unas tapas bajo la mirada de la estatua de Colón. A escasos metros está ubicado el ayuntamiento, un edificio de estilo neoherreriano situado en la plaza Constitución. También a 10 minutos a pie desde la estación se encuentra una de las construcciones más importantes del patrimonio religioso de Huelva, la catedral de la Merced, de fachada barroca y cuya edificación se inició en el siglo XVII.
Otro de los grandes atractivos para ir a Huelva es, sin duda, el entorno natural que rodea la ciudad, como las marismas del Odiel. La gastronomía es otro punto a favor para descubrir Huelva. Y no es para menos, ya que la calidad de sus productos le valió el título de Capital Gastronómica en 2017. Entre los platos más emblemáticos de la ciudad están tanto los provenientes de la sierra como los relacionados con el cerdo ibérico o las setas. Pero durante el viaje a Huelva no hay que olvidarse de probar la variedad de pescados y mariscos de sus aguas, especialmente las gambas blancas, los camarones o las cigalas, entre otros. Además, Huelva es conocida por ser una de las mejores y mayores productoras de fresas, con las que se elaboran deliciosos postres. Y para terminar la visita, hay que tener en cuenta que esta ciudad de la Costa de la Luz ofrece unos bonitos atardeceres en la zona del muelle del río Tinto.