A la hora de buscar unas vacaciones de verano junto al Mediterráneo, un buen plan es viajar en autobús a Fuengirola, una de las ciudades más deseadas de la Costa del Sol, destino turístico de sol y playa por excelencia, que también ofrece otros muchos atractivos a sus visitantes. La población tiene un importante legado histórico, fruto de los distintos pueblos que pasaron por ella (como los romanos o los árabes) desde que fuera fundada por los fenicios en torno al siglo VI a.C. Bañada por el mar Mediterráneo, la ciudad malagueña se corona en su zona norte con un paisaje montañoso, ideal para hacer senderismo. Su oferta de diversión y ocio es enorme, siendo uno de los mayores atractivos para los visitantes que llegan en autobús a Fuengirola desde distintos puntos de España.
Reservar billetes de autobús a Fuengirola
La estación de autobuses de Fuengirola se encuentra en la céntrica calle de Alfonso XIII, a poco más de 10 minutos a pie del centro urbano. Entre los distintos trayectos de autobús que pasan por ella se encuentran numerosas conexiones interurbanas a ciudades nacionales e internacionales, destacando algunos destinos de Portugal. Los alrededores de la estación cuentan con cajero automático, cafeterías y varias opciones de alojamiento. La estación de tranvía o trenes de Cercanías se encuentra a escasos 5 minutos caminando. Dos de las rutas más populares son la ruta de autobús Madrid-Fuengirola en un trayecto que suele durar entre 6 h 30 min y 11 h 30 min, y la ruta de autobús Málaga-Fuengirola, cuya línea M-113 interurbana cubre el trayecto en aproximadamente 45 min. Las principales empresas que ofrecen servicios de transporte a Fuengirola son Socibus, Daibus, Avanza y ALSA. La red de autobuses locales, por su parte, está integrada actualmente por seis líneas que conectan cómodamente los distintos puntos de la ciudad.
Transporte público en Fuengirola
Desde la estación de autobuses de Fuengirola se puede llegar fácilmente a pie al centro de la ciudad, ya que la plaza de España está a unos 700 metros. Aún así, si se lleva mucho equipaje o niños pequeños, lo más cómodo es tomar un taxi justo al lado de la estación. Otra opción es moverse con los autobuses urbanos de Fuengirola, cuyo servicio está integrado por seis líneas regulares, de las cuales solo la línea 1 y la 5 operan fuera del término municipal. El precio del billete ordinario es de 1,15€*, el de jubilado 0,50€* y el bonobús cuesta 9,10€*, aunque no es válido para los domingos y festivos. Desplazarse por Fuengirola en taxi es posible 24 horas al día y hay un total de 21 paradas repartidas por toda la urbe. Disponen de vehículos adaptados para minusválidos, así como de vehículos de cinco, ocho y nueve plazas. Las tarifas para el servicio mínimo diurno son de 4,60€*y 0,95€* por kilómetro recorrido, con bajada de bandera de 3,15€*; y para el servicio nocturno el mínimo es de 6€*, 1,15€* por kilómetro y 3,78€* por bajada de bandera. La tarifa de fin de semana aplica un 20% de incremento a los precios base. En Fuengirola uno puede moverse en tren de cercanías, que hace la función de tranvía o metro, y comunica la ciudad con los barrios de la periferia con cuatro paradas: Los Boliches, Carvajal, Torreblanca y Fuengirola. También es una buena opción ir en bicicleta por Fuengirola, alquilando una en cualquiera de las empresas que ofrecen este servicio, ya sea por horas, días o semana. Las hay de paseo, de montaña o eléctricas, para los que se quieran mover más cómodamente.
El aeropuerto más cercano de Fuengirola es el Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol (AGP), a 27 km de distancia. La manera más rápida de alcanzarlo es en tren: la línea C1 de Cercanías cubre el trayecto entre Fuengirola y el aeropuerto de manera directa en aproximadamente 33 min. La línea C1 tiene trenes cada 20 minutos. El coste del billete es de 2,70€*.
Visitar Fuengirola
El viajero que llega a la estación de autobuses de Fuengirola puede ir caminando en 10 minutos a la plaza de España, donde se encuentra el ayuntamiento. Al lado, el parque de España, con su zona infantil rodeada de una enorme variedad de árboles. Muy cerca, está la plaza de la Constitución, en la que destaca la iglesia Virgen del Rosario. A 15 minutos está el paseo marítimo, siempre lleno de vida y ambiente en sus terrazas al sol. A poca distancia andando, sobre una pequeña colina, se encuentra el castillo de Sohail, una alcazaba árabe desde la que hay preciosas vistas de la ciudad, y que actualmente sirve de auditorio. También merecen una visita en Fuengirola las Termas de Torreblanca, un yacimiento arqueológico de la época romana. Y en pleno centro se sitúa Bioparc, un zoo en el que se recrea el hábitat natural de distintas especies de animales. La mayor atracción turística que el visitante no puede perderse en Fuengirola* son sus playas, que se extienden a lo largo de sus 8 kilómetros de costa. Las hay para todos los gustos y algunas de las más emblemáticas son la de Los Boliches y la de San Francisco, salpicadas de chiringuitos, restaurantes, zonas infantiles y alquiler de todo tipo de servicios: hamacas, barcas a pedales o sombrillas. Para disfrutar de un entorno más tranquilo y alejado del centro, lo mejor es ir a la playa de Torreblanca o a las Gaviotas. Fuengirola dispone de una amplia oferta de ocio y diversión, tanto diurna como nocturna, esta última localizada entre el paseo marítimo y el puerto deportivo. Restaurantes y bares de tapas hay a lo largo y ancho de la ciudad y en ellos se sirve tanto la gastronomía tradicional con su pescaíto frito o sus espetos, como los manjares más exóticos. Y para disfrutar de la fiesta grande de Fuengirola, hay que llegar en octubre, cuando la ciudad se viste de luces y volantes en la feria.
*Precios a 10.09.2018. Los precios pueden variar dependiendo de la fecha del viaje. Sujetos a disponibilidad..