Albacete, situada al sureste de España, pertenece a la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Unas tres horas en autobús la separan de la capital, Madrid. Con un amplio horario de autobuses a Albacete, no tendrás excusa para no ir. Y es que a través de Trainline puedes buscar, comparar y comprar los billetes de autobús y tren que mejor se adapten a tus necesidades. Sin comisiones ni gastos de gestión, y con la posibilidad de pagar con Amex, Paypal, Visa, Mastercard y todo tipo de tarjetas de débito y crédito internacionales.
La estación de autobuses de Albacete se encuentra situada en la calle Federico García Lorca. Además de ser bastante amplia, cuenta con multitud de plazas de aparcamiento y una gran variedad de servicios como tiendas, cafeterías y sala de espera y descanso. Desde algunas ciudades como Alicante o Murcia salen autobuses a Albacete todos los días.
Viaja en autobús de Alicante a Albacete en unas 2 horas o de Murcia a Albacete en menos de 2 horas. Si por alguna razón prefieres viajar en tren, Albacete cuenta con servicios de tren de alta velocidad que conectan la capital manchega con ciudades como Madrid y Valencia. También dispone de enlaces con otras ciudades de Castilla-La Mancha como Cuenca y Ciudad Real. La distancia entre ellas es de 30 minutos y 2 horas respectivamente. Los trenes parten de la estación Albacete Los Llanos. Es la más grande de la comunidad y se encuentra en las inmediaciones de la estación de autobuses. Dentro, el viajero encontrará el centro comercial Vialia.
Una vez en Albacete, lo mejor es ir hasta el centro. Como es una ciudad pequeña, llegar hasta ahí es sencillo. Como prácticamente no hay vuelos a o desde el aeropuerto de Albacet, el taxi es el único medio de transporte disponible para trasladarse a la ciudad. Para aquellos que viajen en tren o en autobús, las mejores opciones para dirigirse al centro son el autobús y el taxi.
Las estaciones de tren y autobús están separadas por pocos metros de distancia y desde ellas se puede realizar una ruta para conocer la ciudad que comenzará en el casco antiguo, concretamente a la plaza del Altozano, donde el viajero podrá entrar en el antiguo ayuntamiento, hoy convertido en el museo municipal. Además de admirar su arquitectura, con su torre del reloj y el escudo de la ciudad, se puede visitar la exposición permanente de arte popular del mundo. Pero aquí llama sobre todo la atención su fuente y sus tres esculturas. Una es el monumento al Cuchillero, que rinde homenaje a los cuchilleros que vendían sus productos a los viajeros cuando el tren llegó a la ciudad. Y ahí empieza la ruta de la Cuchillería, que pasa por visitar su museo y varias empresas que cuentan con la marca de garantía AB-Cuchillería de Albacete.
Después se puede ir en dirección a la plaza de la Catedral, donde está el templo y el Ayuntamiento. No se puede dejar de admirar la espectacular arquitectura del pasaje de Lodares. Los que prefieran un sitio más tranquilo y estar en contacto con la naturaleza tendrán que acercarse al parque Adelardo Sánchez.
Para conocer un lugar también hay que degustar su gastronomía y los platos manchegos son una delicia. Algunos de ellos, como el chorizo, el lomo de orza, la morcilla, los cascos de patata con alioli o los caracoles son muy típicos de la región. Si se quiere ir de tapas, las calles Tejares y Concepción son la zona con mejor ambiente. Para salir a tomar algo por la noche, lo mejor es el barrio de Carretas, situado en el centro de la ciudad y con varios hoteles en las proximidades.
Se puede hacer coincidir la estancia en el destino con sus eventos más importantes. La ciudad acoge en septiembre la feria de Albacete, en octubre tienen lugar las jornadas de la Tapa y en junio es tradicional celebrar San Juan.