Pese a su estresante ajetreo, uno de los privilegios de vivir en Madrid es que cuenta con unos preciosos alrededores para visitar cómodamente en el día. Te recomendamos 5 ciudades que se encuentran a menos de una hora en tren de la ciudad, ideales para planear excursiones para toda la familia haciendo una visita cultural, interesante y con actividades para los más pequeños, en la que también podréis disfrutar de la naturaleza que rodea la capital.
- Alcalá de Henares
- Cuenca
- Aranjuez
- Segovia
- Toledo
1. Alcalá de Henares
La ciudad natal de Miguel de Cervantes es una opción genial para pasar un día desconectando del ritmo en la capital con los tuyos. Alcalá de Henares se caracteriza por su belleza arquitectónica y el carácter monumental de los edificios que copan sus callejuelas empedradas. El municipio madrileño cuenta, además, con muchas actividades pensadas para el disfrute de los niños, como las representaciones teatrales en Corral de Comedias o las visitas guiadas al yacimiento arqueológico de Complutum. A través de esta ruta, los más pequeños viajarán a través del tiempo hasta la época en la que fuera una gran urbe romana. Un plan fácil, a cortas distancias de Madrid e ideal para disfrutar de una visita cultural, histórica y divertida tanto para mayores como para niños.
2. Cuenca
Esta bucólica ciudad castellano-manchega, de calles tan bonitas como tranquilas, te brinda una atmósfera cercana a la apaciguada vida de pueblo. Declarado Patrimonio de la Humanidad, el casco viejo de Cuenca alberga un reconocido patrimonio histórico y arquitectónico, adornado con ruinas de antiguos castillos, monumentales plazas y otros emblemas turísticos como las Casas Colgadas. El plan estrella para irse de excursión con los más pequeños de la casa es la mágica ruta por la Ciudad Encantada. Su nombre lo dice todo, este curioso paraje de la serranía conquense se forma a partir de infinitas rocas de múltiples e insólitas formas, resultado de la acción climatológica a lo largo de miles de años. Un recorrido señalizado de hora y media te descubre formaciones rocosas con el nombre del animal al que se asemejan. ¡Y el parecido es asombroso!
3. Aranjuez
Declarado Paisaje Cultural de la Humanidad por la UNESCO, Aranjuez ofrece un encantador ambiente donde pasar el día y disfrutar con la familia. Este municipio madrileño goza de una combinación perfecta de naturaleza y arquitectura señorial, protagonizada por el Palacio Real de Aranjuez, un placer para los sentidos de todo aquel que lo visite. También cuenta con innumerables propuestas de actividades pensadas para todos los públicos, desde piragüismo por el río Tajo hasta darse bellos paseos en caballo para gozar, más aún si cabe, de la belleza circundante. Y si estamos que tiramos la casa por la ventana, el súmmum ya es planificarse con algo de tiempo y apuntarse a uno de los viajes en globo que se programan mensualmente en la ciudad. Desde el cielo todo parece más bonito.
4. Segovia
La localidad castellano-leonesa de Segovia es fantástica si buscas un destino al que llegar rápidamente, ya que desde Madrid el tren tarda tan solo media hora. Conocida por su imponente acueducto, aquí se respira un ambiente relajado y tradicional, donde disfrutar de un agradable paseo por sus estrechas calles, desbordantes de encanto. Su pintoresco barrio judío y su majestuosa catedral son algunos de los atractivos dignos de visitar, así como cualquiera de los fabulosos restaurantes que caracterizan a la tierra segoviana. Para probar la exquisita gastronomía local y su plato estrella, el cochinillo asado, sugerimos una parada imprescindible en Mesón Cándido, un referente de la comida castellana. ¡Os chuparéis los dedos! Otra opción ideal es La Granja de San Ildefonso, a unos 10 kilómetros, cuyo Palacio Real y sus maravillosos jardines son el lugar perfecto para disfrutar jugando con los niños.
5. Toledo
Toledo es un lugar para visitar una y otra vez, cuando busques un retiro fácil y acogedor. Entre sus históricas murallas, donde el tiempo parece haberse detenido, la ciudad guarda su encanto entre calles empedradas y antiguos monumentos. Toledo nos retrotrae a un lejano pasado para descubrir un magnífico cruce de culturas: la musulmana, la judía y la cristiana. Su catedral protagoniza esta multiculturalidad, como edificio gótico del siglo XIII erigido sobre una mezquita árabe que, a su vez, fue edificada sobre el que fuera un templo cristiano y visigodo. Tanto si viajas con niños como si eres un amante de la historia medieval, incontables tiendas repletas de espadas y armaduras de época son una de las atracciones más características del lugar. Los más valientes podrán lanzarse en tirolina y disfrutar de una experiencia inolvidable sobrevolando el río Tajo.
Estos son algunos de los mejores lugares que se encuentran más a mano desde Madrid, y más aún en tren, ya que reducirás la duración del viaje en la mayoría de los casos incluso a la mitad. Así podrás disfrutar de los tuyos no solo al llegar sino durante el trayecto, desconectando de todo desde el minuto uno. ¿Has elegido ya tu escapada?